Comúnmente todos conocemos la tartamudez, o al menos tenemos un esquema mental al haber conocido a alguien con este trastorno. Sin embargo, la realidad de esta dificultad en la fluidez es mucho más extensa. Es necesario, como paso previo a hablar sobre este tema, describir la diferencia entre fluidez y tartamudez.
Entendemos por fluidez a las propiedades del habla como la continuidad, la velocidad o el esfuerzo. Por el contrario, el concepto de tartamudez supone interrupciones en el discurso del hablante llegando a poder presentar repeticiones, prolongaciones y bloqueos. Estos elementos pueden afectar al ritmo del habla. A menudo, las reacciones de las personas que tartamudean pueden venir acompañadas por tensión física o reacciones para evitar sus dificultades durante el discurso (Guitar, 2014).
No se trata de un trastorno de la fluidez que afecte de manera exclusiva a un grupo de edad. Tanto niños como adultos pueden presentarlo y la ayuda de un logopeda puede resultar de gran importancia para ellos. ¿Eres un adulto y te preocupan las disfluencias que cometes al hablar? Puedes contactar con Logopedia Latián sin ningún compromiso aquí para que podamos ofrecerte el mejor asesoramiento y tratamiento de logopedia online. Si lo prefieres, también dispones de nuestro servicio de logopedia en Málaga de manera presencial.
Muchas de estas disfluencias pueden tener inicio durante la infancia, aunque las edades más comunes de aparición según varios autores surgen entre los 3 y 5 años. Algunas de las señales que podemos observar si tenemos sospecha de que nuestro hijo/a pueda presentar tartamudez son los siguiente:
- Repeticiones de palabras (partes, sonidos, sílabas)
- Prolongaciones de sonidos de algunas palabras
- Bloqueos (comúnmente llamados ‘atascos’)
- Producciones con exceso de tensión
El logopeda puede orientarte en la detección, el diagnóstico y el tratamiento de los trastornos de la fluidez además de ofrecer información a aquellos pacientes que presenten riesgo de presentar problemas de fluidez. El tratamiento deberá ser completamente adaptado a cada caso, teniendo en cuenta la evaluación de distintos aspectos de la fluidez de su discurso.
Otra importante cuestión en la tartamudez es sobre cuándo debemos iniciar el tratamiento. La respuesta es clara, lo antes posible tras haber obtenido un diagnóstico. La edad será un factor favorable a tener en cuenta para los tratamientos de fluidez, pero no por ello implica que un sujeto adulto no pueda beneficiarse de ella.
Bibliografía:
- American Psychiatric Association – APA. (2014). Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales DSM-5 (5a. ed..). Madrid: Editorial Médica Panamericana.
- Guitar, B. (2013). Stuttering: An integrated approach to its nature and treatment. Baltimore, MD: Lippincott Williams & Wilkings.
- Leal, G. (2018). Manual práctico del logopeda. Por la importancia del logopeda. En Manual práctico del logopeda. Por la importancia del logopeda (pp. 367–398). Psylicom Ediciones.
